Consiste, básicamente, en la reposición de volúmenes para conseguir un aspecto juvenil.

La movilidad de los tejidos faciales afecta al proceso de envejecimiento.

Se considera que en la cara hay unas áreas fijas y otras móviles. Las fijas se mantienen, mientras envejecemos, mantienen la identidad de la persona y actúan como puntos de anclaje para la piel y los músculos.

Las áreas móviles, tienen más tendencia a caerse, los compartimentos de grasa facial se atrofian y se desplazan progresivamente.

La vectorización persigue no tratar solo las arrugas o pliegues sino restaurar también la pérdida de volumen, realizando un lifting y una corrección en 3 dimensiones.

Así se consigue un abordaje facial completo del rostro, un aumento de los volúmenes y un soporte para evitar que los tejidos desciendan.

Se puede realizar con ácido hialurónico o con hidroxiapatita cálcica, siendo esta última, una sustancia más adecuada al tratamiento.

Se hace en consulta y en una o dos sesiones. No es doloroso, aunque algunas zonas puedan ser algo molestas. Se realiza en menos de una hora. Se aplica anestesia en algunos puntos, no siendo necesaria en la mayoría.

Dependiendo del caso se precisará más o menos producto, lo que hará variar el presupuesto.

Se realiza una visita previa, explicativa y de valoración económica.

Tiene una duración de aproximadamente 9 a 12 meses.

Incompatibilidades:

- Hipersensibilidad al producto.

- Embarazo o lactancia.

Efectos secundarios:

- Hematomas

- Enrojecimiento (pasajero)

- Edema  (pasajero)